Por fin ha llegado la hora de lograr tus metas y sueños, ya está bien de poner excusas cada día y cada año que te dejan a mitad de camino haciendo que sientas que todo va mal, que no tienes suerte o que tu vida es un fracaso.
Está claro que todos tenemos sueños o metas que deseamos alcanzar. Puede que tengas en mente grandes proyectos de vida o pequeños objetivos que te hagan sentir que todo tiene sentido, pero ¿cómo alcanzarlos definitivamente? es la gran pregunta que muchos se plantean.
Si estás aquí es para comprometerte contigo mismo y pasar a la acción de una vez por todas. Haz que todo cambie ¡el momento es ahora!
A continuación vamos a compartir contigo algunos pasos que te permitirán lograr todos tus sueños y alcanzar tus metas.
Pasos para lograr tus metas y convertir tus sueños en realidad
Desarrolla una mentalidad positiva
No hay nada más dañino para el ser humano que los pensamientos negativos, en todos los entornos de la vida deberían enseñarnos a trabajar desde niños una mentalidad positiva.
Cuando hablamos de desarrollar una mentalidad positiva, nos referimos a trabajar una actitud mental apta para afrontar los diversos eventos que se desarrollan en tu vida. Se trata de pensar “puedo hacerlo”.
Para mantener una mente positiva, es necesario que te llenes de mensajes positivos. Para ello debes desprenderte de las relaciones tóxicas, de las cosas negativas y de todo lo que sea un conflicto.
En muchas ocasiones puedes notar que los pensamientos negativos vuelven a aparecer en tu mente, eso es normal, tienes años con ellos acompañándote día y noche. Para revertir esta situación, aplica técnicas de pensamiento positivo y visualización.
Define metas específicas
Ser claro con lo que quieres y deseas es un paso importante para establecer tus metas, y no solo para alcanzarlas, también te ayudará a concretar lo que realmente anhelas en la vida.
Definir tus metas debe ser algo consciente y meditado, esto será parte del gran viaje de tu vida a partir de ahora.
Para crear las metas específicas en las que trabajarás hazte las siguientes preguntas:
- ¿Qué quiero lograr?
- ¿En cuánto tiempo lo quiero conseguir?
- ¿Esto encaja con mi propósito de vida?
- ¿Siento pasión por ello?
- ¿Estoy dispuesto a dedicar tiempo para conseguirlo?
- ¿Cómo me sentiré cuando haya alcanzado mi meta?
Realiza un listado de todas las metas y sueños, escribe todo, absolutamente todo lo que tienes en mente, esto te ayudará a dar los siguientes pasos.
Ordena tus prioridades
Ahora que ya tienes la lista de todo es el momento de establecer las prioridades. Trabajar de forma planificada y organizada te va a ayudar a poner foco en aquellas en las que decidas ir trabajando, hacer todo a la vez no es una buena forma de empezar. Si lo haces, terminarás agobiándote y lo dejarás como siempre.
Pon un número a cada una de tus metas y sueños, empezando por el número uno, hasta el total que tengas. En donde uno será tu primera prioridad.
Pon fechas concretas para tus logros
Realizar un calendario con las fechas previstas para lograr tus metas y sueños es una excelente forma de visualizarlo como si ya lo has conseguido, además, te permite trabajar de forma incansable para lograrlo en el tiempo que te has propuesto.
Suele pasar que, si no establecemos una fecha, postergamos las acciones que nos hacen conseguirlo hasta tal punto que se pasan los días, meses y años y no lograremos nunca nada.
Eso sí, hay que ser realista, no puedes pensar en que vas a comprarte un Ferrari en tres meses si tienes 10€ en tu cuenta y ganas 1000€ al mes, para conseguirlo solo puede ocurrir un milagro que te ayude a ganar la lotería. Esto es poco realista o digamos que las probabilidades de que suceda son muy pocas.
No puedes ver el alcanzar tus metas y sueños como algo de suerte, debes tener claro que todo se consigue con visión, trabajo y constancia.
Este calendario debes establecerlo según tus metas, puede ser a meses o años. Cuando le asignas una fecha a tus objetivos estos te inyectan energía, esto hará que aumente tu responsabilidad y compromiso.
Deja de postergar y muévete ya
Una gran diferencia entre los que logran alcanzar sus sueños y los que no tienen éxito, es la acción. Quien actúa tiene altas posibilidades de que las cosas se den.
Viendo series en todos tus ratos libres, estar a todas horas en redes sociales o tener el trasero pegado al sofá no serán las mejores acciones para conseguir oportunidades.
Si trazas un esquema o un plan te será más difícil desviarte del camino hacia el éxito, y aunque tengas momentos de frustración, podrás volver a centrarte visualizando con claridad todo lo que te motiva.
Trabaja a diario, con motivación, ganas y mente positiva. Levántate y dí “qué voy a hacer hoy para lograrlo”. Cada acción es un terreno ganado.
Elaborar tu plan de acción
Ya tienes claras tus metas y en qué fechas debes alcanzar cada una de ellas. A partir de este momento pasamos a otro nivel, el nivel de la “acción”, hacer que suceda será la parte que más vas a disfrutar de todo este proceso.
El plan de acción es el conjunto de tareas que vas a realizar. Cierra los ojos y piensa cuáles son los pasos que debes dar en realidad para llegar a tu meta.
Hacer esto te ayudará a tener una mayor productividad, trabajar de forma organizada, mantener el foco y visualizar de forma clara.
Este plan se convertirá en tu guía, en ella escribirás el paso a paso que vas a seguir. Su planteamiento debe ser flexible y debe ser capaz de adaptarse a cualquier imprevisto que surja en el camino.
- Realiza el listado de tareas a realizar.
- Define la fecha de inicio y fecha de fin de cada una de ellas.
- Establece qué recursos necesitas para realizarla.
Para llevar a cabo este plan de acción se requiere que tengas un alto nivel de compromiso, responsabilidad y fuerza de voluntad. Alcanzarlo depende solo de ti y de tu deseo profundo de lograr tus metas y sueños.
La visualización como parte fundamental del proceso
Hacer una visualización de tus metas y sueños, consiste en crear en tu mente una imagen “real” de lo que vas a lograr.
La visualización debe servir para crear la realidad, para motivarte e inspirarte durante el proceso.
¿Cómo visualizar tus metas y sueños? Se puede visualizar mentalmente, que es como soñar despierto, aunque lo recomendable es realizar visualizaciones con algo físico o tangible como puede ser:
- Tableros de visión o vision boards
- Audios grabados
- Un escrito
Tener una visión de tus objetivos te da la dirección a seguir, te hace ver hacia dónde vas y qué es lo que realmente quieres.
Hacer este ejercicio puede parecer difícil porque requiere que estés concentrado y que tu mente esté libre de distracciones, pero te aseguramos que lo puedes lograr con técnicas de visualización que te ayudarán a trabajar en eso que para ti es tan real.
Es importante tanto tener una visión como tener definidas las metas, porque si solamente tienes una visión pero no tienes claro qué metas quieres conseguir como parte de esa visión, simplemente no podrá hacerse realidad. Si, por el contrario, tienes metas pero no practicas la visualización es como si estuvieras viajando sin saber a dónde vas a llegar.
Cuando vayas a trabajar en la visualización del logro de tus metas y sueños, debes encontrar un estado de calma y relajación, intenta conectar contigo mismo, observa tus sensaciones y emociones ¡vívelo!
Errores que debes evitar si deseas alcanzar tus metas y sueños
El único límite entre lo que eres y lo que quieres, eres tú mismo. Por ello debes evitar cometer los siguientes errores.
Esperar resultados inmediatos
Esperar que los resultados de cumplir tus sueños y alcanzar tus metas sea inmediato es uno de los errores más habituales que cometemos, las cosas van a pasar, pero esto no es magia.
Es muy importante que tengas en cuenta que todo lleva su tiempo. Si esperas resultados rápidos y no los obtienes, es posible que, a medida que pasa el tiempo, sientas frustración y desmotivación, algo que no te puedes permitir en este proceso.
Estás en el camino correcto y ahora se trata de perseverar y poner foco en tus metas, ten paciencia.
El fracaso como una excusa para renunciar
Fracasar es una experiencia difícil, pero como todo, depende del cristal con el que mires el fracaso. Puedes optar por canalizar la situación para impulsarte y trabajar con más ganas o puedes deprimirte y sentirte mal.
Tú eres la única persona que tiene el poder de elegir cómo afecta el fracaso en tu vida y el impacto que tendrá.
Debes asumir el fracaso como una experiencia más para aprender. También puedes verlo como una señal y abandonarlo, lo que supone la vía más fácil para no seguir adelante. Sin embargo, la mejor opción es levantarte, pensar nuevas formas de conseguir tus metas y empezar de nuevo.
Si tienes dudas con respecto a tus metas y sueños lo ideal es hacerte estas preguntas:
- ¿Cuál es la razón de mi fracaso?
- ¿Qué tan importante es esta meta o sueño para mi?
- ¿Qué le diría a alguien que estuviera en mi lugar?
No estar preparado para lo inesperado
Prepararte para lo imprevisto es la mejor forma de evitar que los fallos te afecten negativamente.
Si estás preparado para lo que sea que pase, serás capaz de afrontar cualquier situación sin abrumarte. Piensa que para llegar a la meta tienes que recorrer un camino que, en muchos casos, puede estar lleno de obstáculos, pero nada que tu no seas capaz de superar si estás entrenado para ello.
La rutina diaria te supera
Mantener la motivación día tras día no es fácil, pero es posible conseguirlo si tienes claro hacia dónde te diriges. No obstante, estar inmerso en una rutina cada día puede limitarte y hacer que no puedas salir de ella.
Para lograr tus metas y sueños tienes que hacer cosas diferentes, practicar la creatividad, crear hábitos y nuevos comportamientos que te guíen en el camino al éxito.
Haz una lista de cosas nuevas que te ayudarán a alcanzar tus metas y tus sueños e intenta aplicar una de ellas cada día, esto te hará sentir cada vez más cerca de tus objetivos.
No visualizar lo que es posible
Ya hemos hablado de la visualización y de su importancia para lograr tus sueños y metas. No confiar en la visualización limita tus recursos y no permitirá que pongas foco en aquello por lo que estás luchando en este momento.
Recuerda que la mente es muy poderosa y puede ayudarte a alcanzar tus objetivos y realizar cambios importantes en tu vida.
Distraerte con otros pensamientos
La mente puede ser tu mejor amigo o tu peor enemigo, pero esto solo depende de ti. Debes aprender a focalizar tus pensamientos y no permitir que otro tipo de pensamientos te distraigan de lo que realmente deseas.
Pensar en negativo, centrarte en lo que va mal en tu vida, creer que no eres capaz de conseguirlo, qué van a pensar de mí, muchos tuvieron la misma idea y fracasaron, son solo algunos de los pensamientos que permitimos en nuestra mente y que nos sirven como excusa para abandonar nuestras metas.
Establecer objetivos poco realistas
Es cierto que eres capaz de alcanzar cualquier meta que te propongas. Asimismo, debes tener claro cuáles son los plazos de tiempo para conseguirlo, con qué recursos cuentas o cuánto tienes que trabajar para conseguirlo.
Además, debes establecer metas que puedas ir logrando de forma escalada, metas más fáciles pero que cada una de ellas te lleve a alcanzar tu objetivo final.
Si te la pasas postergar tus metas y sueños, este puede ser un buen comienzo para alcanzar el éxito.
Ysabela Guzmán (@comienzoellunes) te ayudará en este proceso para que seas capaz de realizar cada uno de los pasos que te hemos mencionado. Inscríbete en el curso de Planifica Tus Metas y Pasa a la Acción en 2021 y aprende a visualizar, planificar y materializar tus sueños.